Y el mundo sigue de cabeza pero yo… ¡Feliz!... así es, este es mi estado de ánimo el día de hoy. No es que piense que la felicidad lo es todo, peor ayuda mucho sentirse así de vez en cuando, mi madre dice que se debe al exceso de glucosa en mi sangre el día de hoy provocado por la gran cantidad de azúcar que he ingerido comiendo tanto dulce, ante semejante comentario evidentemente hice caso omiso y procedí a comer más dulces (los amo). Escribo esto para que quede muestra de que no solamente puedo transmitir mis estados de ánimo más deprimentes.
En realidad tengo motivos para estar más estresada que feliz, pero por el momento me limito a darme un descanso de mi exposición sobre armas (¡uy! que tema tan recreativo, ajá) y dejo que mi mente se disperse con la música (la mejor compañía en cualquier momento). Supongo que a todos nos pasa que tenemos momentos o semanas un tanto bipolares, de lo más dramático a lo más simple podemos pasar en cuestión de un instante. Algunos días somos los seres más conscientes de todo lo que pasa a nuestro alrededor, otros simplemente nos vale, que ruede el mundo.
Y efectivamente, el mundo rueda, inevitablemente, rueda y rueda; así ha sido siempre, y el día que ese mundo se detenga es porque hemos muerto. Por eso, me gusta disfrutar estos momentos en los que nada puede borrar mi sonrisa, como ya había mencionado es mi máscara favorita. Sin embargo me quedé pensando en lo que dijo la profesora la clase pasada sobre esa apatía generalizada de las generaciones de hoy ante la vida, ¿será? (nótese mi cambio de actitud feliz a una con ciertas dudas, jajajaja), yo creo que definitivamente algo nos pasa, no estoy convencida que sea apatía, pero estoy segura de que carecemos de algo que otras generaciones tuvieron.
Probablemente las cosas no nos han costado como a nuestros padres, y todo nos puede parecer tan sencillo que solemos quitarle valor a aspectos significativos. No creo que el problema sea lo material, porque las desigualdades siguen, pero si algo que debe estar en el inconsciente colectivo, que provoca una cierta cohesión e identificación en el tiempo y el espacio, en la misma realidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario