jueves, 30 de septiembre de 2010

Tan... tan... tatan...

Ayer por la noche estaba viendo la televisión y comentaron algo sobre Enrique Peña Nieto y su novia, no le presté atención y le cambié, de pronto en otro canal comentaban lo mismo, entonces pensé: ¿se murió?, ¿chocó?, ¿por qué tanta atención?, abrí internet y oh sorpresa... el gobernador del Estado de México se casa el próximo noviembre con la actríz de telenovelas Agélica Rivera, ¿novedad?... no.

Mi intención de escribir sobre esta noticia es manifestar mi molestia por el circo que el equipo de marketing del gobernador y Televisa están armando en miras a las elecciones presidenciales de 2012, y peor aún cómo pretenden "manipular" las mentes inocentes de muchas personas que caerán ante el engaño de la "historia de amor" y acudirán a votar por el candidato, aún no oficial, del PRI para la grande. Para lo cual se ha desarrollado con mucho tiempo de antelación, una campaña masiva, literal, masiva, en cuanto medio de comunicación existe, todo ha sido perfectamente calculado, entrevistas, declaraciones, portadas de revistas, spots, informes de gobierno, etc.

Que triste me resulta contar con esta clase de políticos que buscan venderse como un producto, o ¿será que la culpa de que esto pase se reparte entre todos?, la verdad creo sí; no me imagino un producto con éxito sin compradores, y sobre todo si se vende en un medio tan masivo como la televisión, si cuenta con todo el patrocinio de la lcase política, empresarial y hasta de los miembros de la ANDA. Y me molesta aún más que se atrevan a declarar los "enamorados" que la fecha de la boda (27 de noviembre de 2010) se fijó para no chocar con tiempos políticos.

Por lo visto no saben que los "tiempos políticos" comenzaron desde el 2006; y que su telenovela cuyo final feliz se espera que sea en Los Pinos, es tan evidente que espero no muchos se la crean.

P.D. realmente estas cosas me molestan...

domingo, 26 de septiembre de 2010

Las despedidas

En esta ocasión decidí escribir sobre el tema de la semana, el cual me parece es un tema con el que constantemente estamos en en contacto, sea por la situación que sea las despedidas se hacen presentes en nuestra vida por diversas circunstancias. Unas más dolorosas que otras, todos alguna vez las hemos experimentado.

Pero, ¿qué es una despedida?, un adiós, o un hasta luego, una oportinidad para valorar a esa persona, esa etapa de la vidad o ese objeto, en fin, aquello de lo que nos despedimos y que de alguna u otra forma sabemos que no regresará a nuestras vidas o que tradará mucho en hacerlo. Quizá la muerte sea la despedida más dolorosa y a la que inevitablemente todos nos enfrenteramos algún día; para los que ya hemos enfrentado la muerte de un ser querido, podemos afirmar que es un momento por demás doloroso y de total incertidumbre, sin embargo conforme el tiempo transcurre la despedida se hace más lejana y podemos notar que nos ha dejado una enseñanza de vida.

Como parte de la vida misma, las depsediadas son tan complejas como el número de individuos que habitamos este planeta; abarcan todo tipo de situaciones y circunstancias, como que un niño se despida del kinder, o unos padres de su hijo que se va al extranjero, o el adiós a una relación de pareja, o el fin de una etapa de la vida, de un trabajo, el despedirse de una casa, de un auto, etc., cientos pueden ser los casos, pero lo importante es saber superar las despedidas en el tiempo y forma correctos, de lo contrario las podemos arrastrar hasta que se conviertan en recuerdos amargos, lo cual se puede evitar si se sabe canalizar la serie de sentimientos que estas provocan.

Lo anterior no es tarea fácil pero es de gran ayuda para ver a las depedidas como el útimo recuerdo de aquello, o de esa persona, que laguna vez nos dibujó una sonrisa en el rostro. 

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Por otros cien años más



Hoy una de las noticias más agradables en los medios de comunicación es la celebración del centenario de la Universidad Nacional Autonóma de México, celebración que comparto y que me es motivo de orgullo y reflexión, no sólo porque soy universitaria, sino porque soy mexicana, y estoy consciente de lo mucho que ésta me ha dado y de lo mucho que le debo; creo que es precisamente esa reciprocidad la que resume el valor que le damos a la UNAM.

No creo que esxista otra casa de estudios en el país con la que alguien se pueda sentir tan identificado, no sólo por pertenecer a ella, sino también por todo lo que a la vida del país aporta y que ha aportado desde su fundación. Ser la Universidad Nacional no es taea fácil y ha sido, es y seguirá siendo compromiso de toda la comunidad que la conforma garantizar que los mejores académicos, investigadores, profesionistas, etc. egresen de ella, para seguir contribuyendo al desarrollo del país.

Es cierto que hay cosas, sobre todo materiales y recursos económicos, que le hacen falta, ya que lamentablemente la educación en México es uno de los rubros más olvidados al momento de elaborar el presupuesto federal, además de que también cuenta con problemas estructurales y en ocasiones de organización, pero aún con eso se mantiene en pie y día a día es una Universidad pensante y productiva, donde todos los credos, clases sociales, ideologías, etc. tienen cabida, porque es plural y pertenece a todos.

Creo que ser parte de la comunidad UNAM debe ser considerado el primero de muchos logros en nuestras vidas, y espero que en muchos de nostros llegue a ser parte de estas para no olvidar dónde y cómo nos formamos.

Porque como México no hay dos, y como la Universidad ninguna... ¡vamos por cien años más!

domingo, 19 de septiembre de 2010

Otro bicentenario que festejar


El Oktoberfest es un festival realizado en Munich anualamente y que ha adquirido fama mundial por más de 190 años; el centro de atención desde luego recae en la creveza por considerar que en esa zona se produce una de las mejores cevadas del mundo, cuyos altos índices de calidad datan del siglo XVI y de la cual tanto productores como consumidores se sienten muy orgullosos.

La fiesta incia a finales de septiembre y dura hasta inicios de octubre, este año la ignaugaración fue el día de ayer, 18 de septiembre, y cuncluirá el 3 de octubre antes de la media noche; fue iganugurado por el alcalde Christian Ude quien, como una especie de tradición, rompe el primer barril de cerveza y sirve el primer tarro dando por inciada la celebración, antes de eso no se puede consumir esta bebida.

Fue en 1810 que se inició esta tradición, aunque no se realizó como festival de la cerveza; todo surgió por la celebración del matrimonio del Príncipe Luis I de Baviera con Teresa de Sajonia y Hildburghausen, a esta asistieron los habitantes de la ciudad y su duración fue de días, se llevó a cabo sobre el Theresienwiese, también conocido como Wiesn, un campo abierto ubicado al lado de la muralla de Munich. Debido al éxito de la celebración la fiesta se repitió al año siguiente, claro que sin matrimonio de por medio, y con la repetición año tras año se convirtió en una tradición a la que se le fueron agregando elementos como desfiles, la promoción de las cervceras, entre otras atracciones.

Así que durante dos semanas en esta localidad alemana se puede disfrutar de cerveza, comida y fiesta... fiesta... y fiesta. Seguro muchos han visto a esas hermosas chicas ataviadas con trajes típicos de la región sirviendo y alzando tarros de cerveza, pues justo esa imagen se repite desde que se ignaugura el festival así  que si alguna vez están por aquellos lugares en estas fechas y tienen más de 10 euros en el bolsillo no duden en asistir a la fiesta de la cerveza más grande del mundo.

Nota: si les queda duda de que sea la más grande, les comento que este año se espera que se consuman por lo menos 6.5 millones de litros de cerveza.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Pasadas las fiestas...

Pasadas las fiestas, bueno, casi todas, estoy sentada frente a la computadora en una tarde nublada recordando la justificación por la cual estoy en casa y no en la escuela, por supuesto, 15 y 16 de septiembre, este año más especiales por ser el bicentenario; y ahora qué sigue, me pregunto, más programas especiales que analizan la hsitoria del país, más imágenes de gente "celebrando el inicio de la independencia", más discursos que llaman a la unidad, qué más, ¡claro!, el centenario de la revolución, faltaba más, otra espectacular ceremonia en donde se gastará dinero al estilo: aquí nos sobra. Aunque creo que tal vez esa celebración no causará tanto revuelo como la del pasado miércoles, no me pregunten por qué pero presiento que el tema de la revolución causa cierta incomodidad al gobierno.

Ahora me pregunto, qué es lo que festejamos el resto de la población, realmente nos percatamos de lo que pasa a nuestro alrededor o simplemente nos dejamos llevar por las fuerzas ocultas que manipulan nuestras acciones, el alcohol que se consumió la noche del 15 y cuyos efectos aún los sienten muchos, se debió al festejo por la independencia, a la ignorancia de muchos, a nuestro espiritu fiestero o a la necesidad de desahogar nuestras penas reprimidas...

¿Penas reprimidas? se preguntaran, sí, eso, penas que como país y como individuos guardamos y sobrellevamos, penas de todo tipo, unas más fuertes que otras, muchas que nos identifican como familia, como comunidad, como género, como miembros de una clase o simplemente como país; pienso que son precisamente esas penas las que algún día harán que, primero como individios y dueños de nuestras vidas, y después como sociedad, celebremos de verdad ser una nación y un país como ningún otro.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Sin acceso al zóclao, motivo: bicentenario

El día de hoy me di un paseo por el centro de la ciudad, lo cual hace tiempo que no hacía, y menos en septiembre, pero esta vez me dije: veamos que tal luce el zócalo con motivo del tan afamado bicentenario. Así que decidí caminar sobre Madero (una de mis calles favoritas) para llegar a la plancha, y cual va siendo mi sorpresa, Madero está en plena remodelación y a marchas forzadas porque tiene que estar lista para el miércoles; mi sorpresa aumentó cuando logré llegar a la plancha ya no pude ver nada atarctivo debido a que hay una especie de divisón improvisada tipo muro de color blanco que impide el acceso a la plancha y sólo se observan grandes estructuras metálicas que imagino conforman un gran templete, con luces, gruas, etc.

No me quejo de la colocación del escenario o cosas así, sino que más bien les quiero compartir mi opinión sobre ese despliegue de prodducción que pretende lograr la mejor de las celebraciones el miércoles por la noche, creo que el fin de tanto fierro en el zócalo es impedir que mucha gente se concentre por algún motivo de seguridad, porque esa propaganda de: quedate en casa y disfruta del espectáculo por televisión no es coincidencia; podrá parecer teoría de la conspiración o smple chisme, pero sólo el gobierno y Lujambio saben cuál es la situación de riesgo para el miércoles.

En tanto, yo espero que la calle de Madero quede lista y que mi especulación no sea confirmada.



jueves, 9 de septiembre de 2010

Y la Barbie... ¿dónde dejó a su Ken?

Como había comentado, los temas de la farándula del narcotráfico son de mi interés, por lo que estos días he estado muy atenta en lo que denomino el show de la Barbie; como sabrán, Edgar Valdéz Villarreal fue capturado el pasado 30 de Agosto en el municipio de Lerma, en el Estado de México, gracias a un "operativo" donde participaron elementos de inteligencia y que contó con un despliegue tecnológico y un tiempo de preparación sin precedentes (de acuerdo a lo declarado por la PGR y hoy puesto en duda por la opinión pública), desde luego acompañado de la debida presnetación ante los medios de comunicación del delincuente cuyo estado de ánimo parecía el de un adolescente que le da el avión al papá en una reunión familiar.

No es que yo esté en contra de la detención, si ha cometido delitos, que cumpla una condena; pero lo que si no me creo, y menos con las declaraciones de este personaje, es que acciones como esta sean un logro en la lucha contra el crimen organizado, o ¿acaso la situación al norte del país cambió el 31 de Agosto?, o ¿ese día las ejecuciones terminaron?, desde luego que no, y por eso me indigna que el gobierno pretenda vernos la cara de que sé yo a la población. ¿Qué señal debemos mandar para que esto pare?, me pregunto cada vez que leo el periódico o escucho el radio, ya que encender la televisión y ver las noticias del Televisa o Tv Azteca me produce  indigestión.

En mi humilde opinión el asunto de la Barbie deja una estela de humo mejor apodada "atole con el dedo" a fin de ganar puntos en el camino a 2012, sí señores, en este país las campañas duran seis años con factura a nuestros impuestos, y ausntos como la seguridad nacional y la integridad de la población pasasn a un segundo plano, porque al fin y al cabo así ha sido siempre o ¿no?...

Pues no... ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ya basta!!!!!!!!!!

domingo, 5 de septiembre de 2010

Cuando no tengas nada que escribir recuerda aquello que pasó en clase...


Estaba acostada en mi camita, maldiciendo el momento en el que comí demasiada grasa y volvió mi gastritis, cuando recordé que mi blog estaba esperando su segunda entrada semanal; así que no sabía si hablar del dolor o de algún tema vago... desde luego me decidí por el tema vago.

Les platico que en cierta clase que tomé el viernes pasado salió el tema de la cultura y aquello que caracteriza a una de otra, las culturas a comparar fueron la alemana y la mexicana, mientras el profesor intentaba quitar los estereotipos que tenemos de los alemanes surgió el tema de las relciones de pareja. Yo pensé: no, de nuevo a escuchar los pensamientos profundos que las personas tienen sobre el amor y que aprovechan para sacarlo apenas se presenta la oportunidad. No porque yo no los piense o algo así, sino por la necedad de los individuos de querer homogeneizar las relaciones de pareja, por ello decidí no hacer caso de la conversación y mejor concentrarme en jugar con mi celular y melestar al chico (que tanto me gusta) que estaba al lado de mí.

De pronto un comentario llamó mi atención, "...los alemanes no son los libertinos que creen, a ellos les gustan las mujeres dedicadas al hogar, así, ascendocitas...", dirigí mi mirada al profesor con cara de: ¿qué?, y él me miró con cara de: lo que oíste. En ese moemnto puse atención a lo que mis compañeros comentaron y que me gustaría ocmpartir con ustedes. 

Para mi sorpresa el profesor comentó que los alemanes debido a la importancia que le dan a las relaciones personales, suelen buscar pareja en el exterior, y sus favoritas, en el caso de los hombres, son las mujeres latinoamericanas, ya que las alemanas son muy celosas y en muchas ocasiones no resultan el prototipo de esposa "ideal", así, "ascendocita". Entre mis múltiples pensamientos resaltó la palabra machismo, que suelo relacionar mucho con México; pero esto puede cambiar desde esa clase debido a que el profesor me aseguró, sin temor a equivicarse, que los hombres alemanes son más machos en el sentido en que buscan a aquella mujer dedicada al hogar, a los hijos, a preparar la cena cuando su esposo llegue, etc. esas cosas que no tienen nada de malo desde luego, pero que a varios de mis compañeros les pareció ridículo en pleno 2010 (lo que me causó risa). La plática seguía cuando un compañero dijo: pues que descepción se han de llevar al pensar que las latinas son más fieles y más ascendosas, porque como que son de "moral ligera".

Podrán imaginar las mil cosas no muy agardables que pensé ante semejante comentario, ¿cómo se atrevía a sacar sus traumas así? (risas), ¿qué le pasa a la gente?, que porque somos una sociedad machista, que porque no la somos, porque las mujeres hacemos nuestra vida, porque no la hecemos y epseramos a que un hombre la pnga en orden, porque no lo esperamos, porque ya no creemos en el amor como antes, porque no sabemos lo ques el amor, porque mamá y papá lo hicieron de una forma y nosotros de otra, que porque la "moral ligera"...cada quien ¿no?.
Si las sociedades vamos en sentidos contrarios y pretendemos encontrar lo que anhelamos en otra me parece que es un paso adelante, de cualquier forma las relaciones sentimentales son tan complejas como la vida misma. Y el ideal de mujer y de hombre no puede ser parejo para todos, por favor, si te gustan las alemanas o los alemanes, o si te gustan las latinas o los latinos, que más da, lo importante es ser feliz y no lastimar al otro, o ¿me equivoco?...
Punto y aparte.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Amo la comida mexicana

Para colmo no sabía qué escribir en esta ocasión, lo cual me pone de mal humor, pero de pronto recordé la experiencia que pasé con mis amigos este miércoles. Les cuento, asistimos a una conferencia que organizaron en el CELE con motivo del Ramadán, con el fin de explicar a los alumnos de lengua árabe la importancia de este mes para el Islam. Dese luego yo no estudio árabe pero asistí porque a últimas fechas la materia de Medio Oriente ha despertado un interés que no me imaginé tener por la cultura árabe y sobre todo por las tradiciones del Islam; el punto es que al final de la conferencia, y después de haber escuchado la recitación del Corán, organizaron una degustación de comida árabe, y mis amigos y yo más que puestos no lo pensamos dos veces para probarla.

Desde luego que nunca habíamos probado comida parecida, o al menos en mi caso lo más que había probado era el pan, por lo que al observar los platillos pensé que se veían apetitosos e interesantes; como buenos primerizos tomamaos un poco de todo y nos marachamos a un lugar menos congestionado para comer, cada uno comenzó a hacer lo propio sin ninguna queja, era el primer bocado, al segundo observé algunas caras desagradables en mis amigos y pensé: no eres a la única que no le agradó el sabor, así que porbé otra cosa que según yo parecía una bolita de trigo, esa me supo bien; luego tomé café, nada parecido al café que conocemos ya que su olor, consistencia y sabor no puede coincidir con nuestros estándares de lo que llamamos café; cuando pasé a probar una especie de "pizza" árabe, que me había llamado la atención desde que vi la mesa donde estaban servidos los platillos, mi cara de: esto no es lo que esperaba, pasó a una cara de: cómo pueden comerse esto, qué es, aaaahhhh.

Por lo anterior no quiero decirles que la comida árabe sabe mal, ya que simplemente es diferente, muy condimentada y con sabores tan contrastantes que te despiertan todos los sentidos en un instante. Pude notar que es una comida que refleja muy bien a la cultura árabe, desde los ingredientes hasta la forma de preparación, así como la influencia de la religión en todos los aspectos de su vida (para aquellos árabes musulmanes, claro). No la menosprecio y sí la recomiendo para aquellos que disfrutan de los sabores fuertes y un olfato no muy delicado; pero sin lugar a dudas me quedo con la nunca igualada comida mexicana, tan variada y también muy artesanal por cierto. Probablemente cada quien siempre defienda lo suyo y un árabe puede pensar: nada como mi comida.

No me critíquen si parezco muy cerrada... pero... ¿no es la comida mexicana deliciosa?