domingo, 17 de octubre de 2010

Sexo seguro

En estos días se ha desatado una polémica entre padres de familia, Iglesia y la Secretaría de Educación Pública (SEP) por la iniciativa de ésta última de ofrecer gratuitamente condones a los estudiantes de bachillerato.  Dicha polémica no es algo raro en nuestra sociedad, o en estos sectores, que se niegan a aceptar que la sexualidad es algo que acompaña a los seres humanos y que ejercerla con libertad es un derecho que todos tenemos.

Considero que esta campaña que se quiere implementar para que los jóvenes tengan “sexo seguro” no  es algo novedoso, sino que es una responsabilidad tanto de la Secretaría de Salud como de las entidades educativas que por muchos años se han dedicado a evitar el tema de la sexualidad. El hecho de que en los libros de texto se mencionen datos de la fisiología humana y aparezcan imágenes de los aparatos reproductores del hombre y de la mujer, no es sinónimo de educación sexual; es necesario que tanto padres como jóvenes asuman una responsabilidad en este tema, de lo contrario los embarazos no deseados, las enfermedades de transmisión sexual, lo abortos clandestinos, y la gente que abusa de la ignorancia del otro, seguirán siendo una constante.

Salir públicamente y decir que regalar condones es un error porque se promueven las relaciones sexuales, es una aberración en pleno siglo XXI; ¿cómo pretenden responsabilizar a los adolescentes en un tema del cual está prohibido hablar en los hogares y en las escuelas?  Desde luego que no es algo que podamos generalizar, porque existen padres y profesores que pretenden informar a los jóvenes a su cargo sobre los riesgos y consecuencias de tener relaciones sexuales sin protección.

En lo personal, estoy a favor de que los condones no sean un producto inalcanzable económicamente, y que los repartan en las escuelas es el mejor medio para que comience a surgir una conciencia sobre la libertad de ejercer la sexualidad; porque de cualquier forma, los jóvenes la ejercen con o sin conocimiento de las consecuencias, y en muchas ocasiones aunque las conozcan por su educación el condón no es precisamente un elemento importante en sus encuentros sexuales.  Así que… padres de familia y sacerdotes, deberían de informarse adecuadamente antes de querer evitar que se implemente un programa que ni siquiera está en marcha; aunque como propuesta es interesante.

1 comentario:

  1. Muy bien Dee O. ni un sólo dedazo :) a veces se nos van errores es normal, no te apures, sólo trata de revisarlo una última vez... te recomiendo (yo lo hacía porque también se me iban un buen) publicar la entrada y ya publicada leerla ya que, por alguna razón, así ves mucho más fácil los errores... saludos Diana!!!

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